Nacida en 1920 en el departamento de Godoy Cruz, Delia Larrive Escudero fue la primera Reina Nacional de la Vendimia, elegida en 1936 con 16 años, en la primera edición oficial de la fiesta que se convertiría en el mayor emblema cultural de Mendoza. Representando a su departamento, Delia fue coronada durante el acto central realizado el 18 de abril de ese año.

Su elección marcó el inicio de una tradición que, con el paso del tiempo, se transformó en un símbolo de identidad y orgullo provincial. Aunque fue presentada como “vendimiadora”, Delia pertenecía a una reconocida familia mendocina y fue elegida como representante del espíritu laborioso y festivo del pueblo, encarnando los valores de trabajo, belleza y cultura que caracterizan a la celebración.

A lo largo del tiempo se mantuvo ligada al recuerdo de la fiesta y ha sido homenajeada en varias oportunidades por su papel pionero en la historia de Vendimia. En entrevistas y actos conmemorativos, expresó su profunda gratitud y alegría por el crecimiento del espectáctulo que ayudó a inaugurar.

El legado de Delia Larrive Escudero perdura en la memoria colectiva y materializa el símbolo de una época y de una mujer que inauguró, sin saberlo, una tradición que sigue vigente noventa años después. El nombramiento de esta plaza en su honor significa rendir tributo a su figura, reconocer el valor histórico y cultural de una joven oriunda de Godoy Cruz que dió inicio a la historia de las reinas Vendimiales de Mendoza.